miércoles, 22 de julio de 2015

ELEGÍA A JOSÉ LUIS ALONSO VIÑEGLA

José Luis Alonso Viñegla,
descanse en paz.



ELEGÍA A JOSÉ LUIS ALONSO VIÑEGLA
Manuel Fernández Espinosa


Y los amigos mis muertos
Nunca sabemos adónde van...
Van por delante, no vendrán

A la tarde en los huertos
Al arroz con leche o azafrán.

Remembraremos sus gestos,
Sus palabras, su ademán,
Café, habano y pacharán,
Una tarde en fe enhiestos
Quebrados nos acompañarán.

En el vértigo de las horas,
En aquella taberna jaenera
Un bardo de barbas venera
La gentil edad que honoras
Hogaño aventada en la era.

Pero aunque partió el amigo
No pudo vencerle el demonio
Al ángel que da el testimonio
De aquel que estuvo conmigo
Y tenga gloria por patrimonio.

Amigo muerto en el hado,
Aquel tu abrazo fraternal,
Aquellos ojos en el Ideal,
Nuestras manos en el arado
Firmes en el credo imperial.

Cómo os quedáis con nosotros
De modo tan sutil, como palabra,
En donaire o cincel que labra
La bondad de todos los otros
En el corazón que os es leal.

Anfitriones: vuestro comensal
Os agradece las viandas fugaces
Transmutadas en risas veraces
Y esperanza frustrada con sal...
Ningún porvenir tiene un muerto:
Pues los muertos no morirán.

En Tosiria, a 16 de Marzo de 2013.


Semblanza de José Luis Alonso Viñegla: aquí en

sábado, 4 de julio de 2015

LA EPOPEYA VILIPENDIADA: LOS REALISTAS HISPANOAMERICANOS (XVI)



MUERTE EN URICA

Un lanzazo traicionero,
Ha acabado con la vida del Taita Boves.
Parece que su abatido caballo llora.
Y sus leales y bravos soldados hacen lo mismo.
¡Qué tragedia la muerte de José Tomás!

Se afianza la Devotio Iberica en la Tierra Firme,
Ahora Tomás Morales es el director de la bélica orquesta.
No hay tregua para los que mataron al Taita.
No hay tregua para los enemigos del Rey.
Y cual Cid llanero, Boves gana batallas a caballo después de muerto.

Los insurgentes no son nadie. ¡Nadie!
Oligarcas mantuanos y españoles renegados.
Y lacayos del imperio británico. ¡Nadie!
¿No querían guerra a muerte? ¡Ahí tienen!
Nuestras banderas chorrean con la sangre de los enemigos.

Y se bordan exclamando vivas a Boves,
Morales avanza arrollando hasta Maturín.
Los separatistas huyen. Ya no pueden degollar gente indefensa.
Se saborea la victoria…. ¡Pero qué pena!
¡La mejor lanza de las Españas ha muerto en Urica!







LA EPOPEYA VILIPENDIADA: LOS REALISTAS HISPANOAMER...
LA EPOPEYA VILIPENDIADA: LOS REALISTAS HISPANOAMER...

DEL ÁFRICA ESPAÑOLA (XVII)

Imagen de mili-en-melilla.forogratis.es


NANA AMAZIGH

Una nana en amazigh
mi madre me cantaba,
cuando era muy niño,
y de su pecho tomaba,
la leche sana y fuerte,
que me alimentaba.

Allá en el Rif,
la nana se escuchaba,
y hasta la Kabilia,
parecía que retumbaba,
con toda la fuerza
de las tribus que clamaban

gritos bereberes del
desierto y las montañas.
Con esta afilada imagen,
toda mi vida pasaba,
hasta que llegó el momento,
de demostrar mi raza.

¡Guerra! Era el grito
que más se propagaba,
por todas partes.
¡Guerra! Y España
de africana bravura
un ejército formaba.

¡Guerra! Y allá van
los Regulares a la llamada,
y mi tradición familiar
la lealtad acrisolaba
a la patria española,
de la que parte formaba.

Y yo, que bien criado
fui, llené mi de skara,
me puse mi tarbush,
y también la chilaba,
y recordando con
ternura aquella nana

de mi madre, me llené
de fuerza; me guiaba
el honor y la justicia,
y mi sangre, que hermana
de la ibérica, brega
en donde haga falta.

Y sea lo que Alá disponga.
Con los regulares, nada
me falta. ¡Soy un soldado!
Y regresaré a casa,
con una sonrisa
y una medalla,

porque seré el más valeroso,
de toda mi harka.
¡Soy un guerrero amazigh!
El temor no me embarga,
y a la victoria llegaré,
cantando como mi casta.






Antonio Moreno Ruiz